¿Cómo opera el alcoholímetro?
La Secretaría de Seguridad Ciudadana instala puntos de revisión fijos y aleatorios en distintas vialidades de la ciudad.
En caso de encontrar con un punto de control. Los automovilistas deben seguir las indicaciones de los oficiales, como orillarse, bajar ventanas y contestar si se ha ingerido o no alcohol.
En un inicio, el oficial a cargo, se guiará por el olfato, en caso de percibir aliento alcohólico puede proceder a realizar la prueba de alcoholemia.
¿Cuál es el límite permitido?
El artículo 50 del Reglamento de Tránsito de la CDMX establece que “queda prohibido conducir vehículos motorizados cuando se tenga una cantidad de alcohol en la sangre superior a 0.8 gramos por litro o de alcohol en aire espirado superior a 0.4 miligramos por litro”.
Protocolo correcto del alcoholímetro
El artículo 51 de dicho reglamento señala que en inicio, el conductor será sujeto a una entrevista por parte de los integrantes de Seguridad Ciudadana en la que se le pregunte si ha ingerido bebidas alcohólicas, procurando estar a una distancia adecuada que le permita percibir algún indicio de que ha consumido bebidas alcohólicas.
Asimismo solicitará al conductor la licencia para conducir vigente en formato físico o digital y o el permiso correspondiente, así como la tarjeta de circulación del vehículo y la póliza de seguro de responsabilidad civil por daños a terceros vigente, en caso de no contar con alguno de estos, se procederá a levantar la infracción correspondiente por el agente autorizado.