Nota del editor: Jorge Sánchez Tello es Director del Programa de Investigación Aplicada de la Fundación de Estudios Financieros-FUNDEF A.C. Centro de Investigación independiente con sede en el ITAM. Síguelo en Twitter como @jorgeteilus . Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivas de su autor.
(ADNPolítico) – El tercer debate estuvo mejor estructurado y hubo más propuestas por parte de los cuatro candidatos a la presidencia. Los temas que se trataron son de gran importancia para los ciudadanos que vamos a votar el próximo primero de julio.
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Si bien un candidato no puede dominar todos los temas porque para eso se rodea de expertos, debe tener por lo menos un dominio básico sobre lo que va a tomar muchas decisiones.
Me preocupa el tema de las finanzas públicas, el candidato Ricardo Anaya promete bajar el IEPS a gasolina, bajar el ISR, bajar el IVA en la frontera pero, además, con la propuesta del ingreso básico universal es un programa que no es financiable. Este tipo de propuestas en su conjunto terminan por no cuadrar las cuentas fiscales del candidato de la coalición Por México al Frente.
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Andrés Manuel López Obrador insiste en combatir la corrupción, pero no explica los cómo. Me da la impresión de que no tiene una idea clara sobre las finanzas públicas. Es preocupante que siga insistiendo en bajar los sueldos de mandos medios y altos del sector público cuando llevan ya muchos años congelados y se corre el riesgo de que más gente migre al sector privado con mejores sueldos, dejando al sector público con personal poco calificado.
Las propuestas del candidato de Morena-PT-PES en el tema de finanzas públicas son de cuidado. Sigue sin decir cómo se va a acabar la corrupción.
José Antonio Meade hizo mención de la incorporación de la mujer al mercado laboral, guarderías y escuelas de tiempo completo, becas. Me parece muy bien, pero no dijo el cómo se van a financiar estas propuestas. Sin embargo, me parece que el candidato de del PRI-PVEM-Panal es el que más conocimiento demostró sobre el sector público.
Está bien que los candidatos quieran combatir la corrupción, pero no se combate desde la sola idea de tener un presidente honesto y hay muchos problemas que no los resuelve.
Me preocupa que López Obrador haya confirmado su clara intensión de querer cancelar la reforma educativa; es importante evaluar a los maestros para tener una mejor calidad y me parece que tiene una visión muy equivocada al afirmar que es privatizadora, y el argumento más tonto es cuando dijo que fue impuesta por el FMI.
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Por lo menos fue un debate sin tantos ataques personales y si bien estamos en la etapa en que los candidatos siguen prometiendo dinero en muchas formas a los votantes, me preocupa que de llevarse a cabo estas propuestas las finanzas públicas puedan sufrir mayor daño.
Recordemos que la deuda se ha duplicado en los dos últimos sexenios y el próximo presidente debe tener la obligación y el compromiso de mantener las finanzas públicas sanas, pero hasta el momento no se han comprometido, así que esperemos que una vez electo el próximo mandatario mande un mensaje contundente al mercado sobre este tema.
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