A cinco días del asesinato de los niños Alexander y Gael en Culiacán, Sinaloa, la presidenta Claudia Sheinbaum manifestó su solidaridad con la familia de los menores. Además, instruyó a Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación, a contactar a los familiares y otorgarles apoyo.
“Mi solidaridad con lo que pasó con la familia en Sinaloa”, declaró en su conferencia matutina de este viernes.
La Mandataria aseguró que, tras los hechos, se reforzó la estrategia de seguridad en Sinaloa, estado que desde septiembre sufre una ola de violencia generada por los enfrentamientos de dos células del Cártel de Sinaloa.
Sin embargo, defendió la estrategia de seguridad de su gobierno, al considerar que es integral porque atiende las causas de la violencia y mejora los procesos de investigación e inteligencia contra los grupos criminales.
Estamos dando resultados y se van a dar resultados”,
Sheinbaum dijo que ha ordenado fortalecer a la Guardia Nacional y avanzar en la cero impunidad de los delitos en coordinación con la Fiscalía General de la República (FGR). También presumió la ampliación de los programas sociales y anunció la construcción de más escuelas para prevenir que los jóvenes se unan a grupos delictivos.
“Por más que la oposición diga, es fundamental porque nosotros no queremos que ningún joven mexicano se acerque a un grupo delictivo pensando que es una opción de vida, cuando es una opción de muerte”, declaró.
La mandataria informó que el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, se mantendrá en el estado gobernado por el morenista Rubén Rocha, para supervisar la estrategia anticrimen que, enfatizó, qse desarrolla en coordinación con el Ejército y la Marina.
"Se hizo un refuerzo en Sinaloa hace unos días y diario estamos revisando los resultados y avanzando, avanzando, y el Secretario Seguridad ha estado y va a seguir ahí, el Secretario de la Defensa de Marina, están, hay una gran coordinación y colaboración en el Gabinete de Seguridad", manifestó.
La madrugada del domingo 19 de enero, un comando armado intentó robar el auto de la familia Sarmiento Ruiz, en Culiacán. El grupo disparó contra el conductor, que intentó avanzar para esquivar el atraco. Las balas impactaron a Antonio, de 41 años, y a sus hijos, Alexander y Gael, de 9 y 12 años. Los tres murieron.
El crimen indignó a los ciudadanos al punto de que este jueves se manifestaron en Culiacán para exigir la renuncia del gobernador de Sinaloa, el morenista Rubén Rocha.
