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AMLO ofrece más austeridad; expertos alertan riesgos

Pasar de una política de austeridad a una "pobreza franciscana", no solo podría debilitar a la administración pública, también implica atentar contra órganos autónomos, sostienen especialistas.
mar 02 agosto 2022 06:00 AM
AMLO habló de pasar a una pobreza franciscana, pero expertos alegan riesgos por los recortes.
El presidente ha presumido en diversas ocasiones tener un mejor manejo de las finanzas públicas que sus antecesores.

Rumbo a la recta final de su sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha anunciado que su gobierno pasará de la "austeridad republicana" a etapa de " pobreza franciscana " , lo que se traducirá en una nueva lucha por acabar con altos sueldos, disminuir viajes, viáticos y todo gasto de operación. Su nueva pretensión de adelgazar la burocracia podría contraer riesgos como afectar la operación de la administración pública, pero también atentar una vez más contra los órganos autónomos, coinciden expertos.

Desde antes de llegar a la Presidencia, López Obrador prometió que encabezaría un gobierno austero. El compromiso 31 de los 100 que hizo la tarde del 1 de diciembre de 2018 plantea que los recursos que se ahorren por no permitir la corrupción y gobernar con austeridad republicana irían a programas de bienestar. La política de austeridad se logró implementar mediante tres instrumentos: la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, la Ley de Austeridad Republicana y el presupuesto de Egresos de la Federación.

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De acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador, esa forma de gobernar le ha permitido ahorros por 2 billones 845,000 millones de pesos.

Ahora, buscará implementar medidas que le permitan “liberar fondos al desarrollo y entregar recursos a la gente más necesitada”, afirmó.

Rafael Morales, doctor en Ciencia Política y catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explica que la decisión de acentuar medidas de austeridad en la segunda mitad del gobierno se entiende porque el presidente requiere más recursos para terminar obras y, al no contar con una reforma fiscal que le dé más dinero, tienen que echar mano de la estructura burocrática.

“Esto se debe a que el presidente decidió no hacer una reforma fiscal, esa es la clave por la cual el presidente ha insistido tanto obtener recursos de gobierno porque ahí es donde él puede mandar, donde nadie puede limitarlo; él tiene la posibilidad de hacer las reducciones que él considere. El presidente se va a quedar muy corto si considera que reduciendo recursos de su gobierno va a poder extraer los recursos para sus grandes obras como el Tren Maya”, plantea.

Si bien el presidente dijo que implementar medidas de austeridad le han permitido ahorros por más de 2 billones de pesos, no se tiene claridad de la cifra exacta. Informes de Evaluación de la Política y las Medidas de Austeridad Republicana 2019 y 2020 enviados a la Cámara de Diputados por las secretarías de Hacienda y de la Función Pública indican que en los dos primeros años de la administración federal se ahorraron 188,112 millones de pesos.

Para lograr esos ahorros no solo bastaron medidas como cancelar pensiones de expresidentes de la República, prohibir la contratación de seguros privados de gastos médicos y de vida y limitar la remodelación de oficinas por cuestiones estéticas, también hubo recorte de funcionarios. En el primer año se eliminaron 60 mil 322 plazas, aunque el siguiente año se crearon 44 mil 172.

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El analista político y académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, Édgar Ortiz Arellano, afirma que el discurso de austeridad es políticamente rentable pero que conlleva riesgos entre ellos la propia operación de gobierno.

“La austeridad que el presidente pretende implementar en la administración pública de manera extrema es preocupante porque puede debilitar las capacidades operativas e institucionales del Estado mexicano”, sostiene.

El argumento de presidente Andrés Manuel López Obrador para acentuar sus medidas de austeridad es que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre, para lo cual ya delineó que incluso los viajes al extranjero se disminuirán y se optará por la comunicación vía teleconferencia.

Los programas sociales del presidente y sus obras han quedado intactas a cualquier recorte en la administración pública.

"El gobierno está reorientado los recursos hacia sus proyectos estratégicos", refiere Rafael Morales.

El pasado viernes, Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, informó que aún hay margen para implementar más recortes, sin que ello ponga en riesgo a la administración. Para ello ya se tienen en la mira algunos objetivos como revisión de los fideicomisos que aún existen, administración de vacantes sin poner en riesgo la operación gubernamental y revisión a gastos no esenciales.

La pobreza franciscana propuesta por AMLO

Pero estas medidas de austeridad llegan cuando el país atraviesa por una crisis económica derivada de la pandemia de covid-19, un muy pequeño crecimiento económico y una inflación que casi alcanza el 8%.

“A nadie le gusta un gobierno que malgaste el dinero; obviamente, queremos una administración pública que no tenga excesos, pero también tenemos que estar conscientes de que si se reducen las capacidades de la administración pública federal como resultado de esta pobreza franciscana en vez de ayudar a la población en resolver las problemáticas, se van a agravar más,” agregó Ortiz Arellano.

Rafael Morales sostiene que aún acentuando las políticas de austeridad en la administración pública serán insuficientes para darle recursos al Ejecutivo para concluir obras o incrementar su política social.

"La pregunta es ¿de dónde más va a hacer ahorros?, ¿de dónde va a hacer reducciones sin que eso ponga en riesgo la difícil situación que ya vive el aparato público que se quedó con los mínimos para poder operar?", cuestiona.

Algunos funcionarios que se verán afectados serán el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, porque en lugar de salir de México a giras de trabajo, deberá optar por sostener encuentros mediante videoconferencias.

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También los especialistas alertan que se debe cuidar que esta política de austeridad no afecte temas delicados como la seguridad pública y la salud. En los primeros meses del gobierno, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el entonces director Germán Martínez, renunció al cargo tras cuestionar los graves recortes en el sector.

"Ahorrar y controlar en exceso el gasto en salud es inhumano. Ese control llega a escatimar los recursos para los mexicanos más pobres", planteó el también senador de la República.

Jesús Rivero Casas, autor de artículo “La política de austeridad como instrumento para el bienestar y el crecimiento económico en el gobierno de la 'cuarta transformación': lógica y problemas de implementación”, elaborado para la Fundación Mexicana de Estudios Políticos y Administrativos A.C, explica que a la actual administración le faltó negociación y persuasión para implementar con éxito su política de austeridad.

“Si bien el nuevo gobierno, desde la presentación en campaña de su plataforma electoral, tuvo a la política de austeridad como principal instrumento de sus prioridades, nunca contó con una estrategia de negociación para implementar con éxito una medida más pragmática y controversial en relación a lo que se había venido haciendo en los últimos sexenios. La falta de persuasión y negociación con los principales actores políticos le ha cobrado un alto costo”, refiere.

Pobreza franciscana: AMLO anuncia más medidas de austeridad en su gobierno

Atenta contra los autónomos

Al estilo ¿quién es quién en los precios del combustible?, el procurador federal del consumidor, Ricardo Sheffield, presentó un listado con 11 funcionarios que perciben sueldos más altos que el presidente de la República entre ellos ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova; el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, y la presidenta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), Graciela Márquez.

Ricardo.
El titular de la Profeco, Ricardo Sheffield, presentó el ¿Quién es quién?, en los salarios de funcionarios públicos.

El presidente adelantó que nuevamente enviará una iniciativa para limitar esos altos sueldos, lo que a decir de los expertos también es un riesgo.

“Esta reducción de los sueldos es una andanada contra los órganos autónomos que sabemos que no son de la querencia del presidente Andrés Manuel López Obrador. Estos organismos deben tener regulación sobre sus sueldos, y justificarse sus sueldos, pero no se les puede de manera unilateral bajarle sus percepciones”, refiere.

Los organismos autónomos son independientes del poder ejecutivo, eso no gusta al presidente. Entonces el discurso de que hay funcionarios que ganan cantidades exorbitantes, es rentable”.
Édgar Ortiz Arellano, analista político y catedrático de la UNAM.

El presidente López Obrador informó que aunque en el legislativo sus opositores no quieren aprobarle más reformas, él enviará una iniciativa más para que ningún funcionario perciba más que el titular de Ejecutivo federal.

“Hay una ley de austeridad republicana que no se cumple, en franco incumplimiento a la Constitución, a esta ley de austeridad. Vamos a buscar la forma de presentar una ley de iniciativa a la ley de austeridad y si procede una nueva reforma a la Constitución para dejarlo más claro y que no se preste a las interpretaciones que hicieron en el Poder Judicial de manera leguleya los altos servidores públicos”, anunció la semana pasada en su conferencia matutina.

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