AMLO anuncia finiquito a contratos del NAIM y ofrecimiento de otros proyectos
CIUDAD DE MÉXICO (ADNPolítico).- Una semana después de anunciar la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, anunció este lunes que se finiquitarán los contratos relativos a este proyecto y que su futura administración buscará cómo dar a los empresarios afectados un volumen de obra similar al que tenían en el Lago de Texcoco.
“Los contratos con ellos los vamos a finiquitar de conformidad con lo que marca la ley, vamos a pagar la obra que no se ha gastado, vamos a pagar los gastos recuperables, vamos a ver también cómo vamos aprovechar lo que ya está”, dijo a periodistas tras reunirse en privado con un grupo de contratistas.
Entre las alternativas que se analizarán a partir de este martes está la posible participación de los empresarios en el proyecto aeroportuario de Santa Lucía, en la rehabilitación del actual aeropuerto capitalino o la de la terminal aérea de Toluca, o bien, en los trabajos para recuperar el lago.
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“Ellos van a participar en Santa Lucía, es muy probable (que) en otras obras, y lo que dijimos en el volumen de obra que se contrató en el caso de Texcoco, el volumen de obra se va a realizar, todo va a ser legal, todo va a ser absolutamente legal”, dijo López Obrador afuera del restaurante de Polanco donde se realizó el encuentro.
En la reunión estuvieron los empresarios Héctor Ovalle, Antonio Gómez en representación de Carlos Slim, Hipólito Gerard, Olegario Vázquez Aldir, Carlos Hank Rhon, Alberto Pérez Jacome y Guadalupe Phillips, entre otros.
De parte del equipo de López Obrador estuvieron Alfonso Romo, Carlos Urzúa y Javier Jiménez Espriú.
“Se habló en los mejores términos, se portaron muy bien, les diría que de manera comprensiva, responsable y al 100”, dijo el presidente electo.
Por separado, el futuro secretario de Comunicaciones y Transportes, Jiménez Espriú, señaló que los contratistas han invertido unos 58,000 millones de pesos, mientras que los gastos no recuperables ascienden a 40,000 millones.