López Obrador se lanza contra la "burocracia dorada"
CIUDAD DE MÉXICO (ADNPolítico) - Andrés Manuel López Obrador tiene en la mira los sueldos de la burocracia que labora en organismos autónomos como los institutos Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) y el Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
López Obrador criticó este martes la “burocracia dorada” que representa el Instituto de Transparencia y aseguró que no ha servido de nada frente a temas de interés nacional.
“No se trata de andar creando aparatos burocráticos, gastando el dinero del pueblo en mantener a burócratas de altos vuelos, a la burocracia dorada. Eso se va a terminar, ahí tienen ustedes como ejemplo, el Instituto de la Transparencia, ganan como 250,000 pesos mensuales los consejeros y qué han hecho desde que se fundó ese instituto”, cuestionó.
“¿Han evitado la corrupción en México? Nada. Al contrario, cuando se fundó ese instituto decidieron de que iban a mantener en secreto todo lo que se le condonó de impuestos a los grandes contribuyentes y hace poco ese mismo instituto de la Transparencia resolvió mantener en secreto el caso Odebrecht”, expuso.
El tema salió a cuenta cuando se le preguntó si se crearía una comisión para investigar la matanza del 2 de octubre de 1968. Al respecto, el presidente electo dijo que no se trata de hacer más burocracia, sino de que las dependencias que existen trabajen.
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Morena empleó su mayoría el pasado 13 de septiembre y aprobó en la Cámara de Diputados la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, una norma que marca que ningún funcionario pueda ganar más que el presidente de la República.
Días después de esa aprobación, el INEGI modificó al alza su manual de percepciones de sueldos y salarios. El diario El Universal reportó que de acuerdo con este tabulador, el presidente de este organismo tendría una percepción ordinaria bruta mensual sin impuestos 217 mil 257 pesos, casi el doble de los 108 mil pesos que ganaría López Obrador.
En respuesta, el presidente electo advirtió al INEGI –según consignó El Universal– que nadie ganaría más que él. “Está en una ley y el que incumpla la ley va a ser sancionado. Sea quien sea, por encima de la ley nadie”, comentó.
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Previamente, dos semanas después de la campaña, el anuncio de este ajuste en el salario de los funcionarios públicos generó distintas reacciones como en el Instituto Nacional Electoral (INE), el cual criticó las medidas de austeridad propuestas por López Obrador.
El consejero Ciro Murayama dijo en esa ocasión que las remuneraciones del personal del instituto no son un privilegio y corresponden con la labor que desempeñan, mientras que el consejero presidente Lorenzo Córdova dijo que acataría cualquier disminución que se definiera.
Actualmente, un consejero del INE recibe alrededor de 174,000 pesos y la propuesta es que ningún funcionario gane más de 108,000 pesos.
De acuerdo con la Ley de Remuneraciones aprobada en septiembre pasado, ningún servidor público podrá recibir una remuneración por el desempeño de su función mayor a la establecida para el presidente de México, ni podrá tener una remuneración igual o mayor que su superior jerárquico, salvo cuando sea un trabajo que exija preparación, formación o conocimiento resultado de los avances de la ciencia y la tecnología.
