Diputados del PAN piden al gobierno expulsar a la embajadora de Venezuela
Los actos del gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela requieren medidas contundentes, aseguran diputados federales del PAN, quienes piden a la administración de Enrique Peña Nieto que expulse de México a la embajadora de ese país, María Lourdes Urbaneja, así como retirar de territorio venezolano a la representante diplomática mexicana, Eréndira Araceli Paz.
En una propuesta de punto de acuerdo presentada este miércoles a la Comisión Permanente, los legisladores critican la reciente elección de la Asamblea Constituyente —convocada por Maduro—, y aseguran que representa un "duro golpe" contra la voluntad de los venezolanos y que revela la transformación de la Revolución Bolivariana en una dictadura.
Ve: Violencia y muerte marcaron la elección en Venezuela
La posición de los panistas se suma a otros pronunciamientos de rechazo a los comicios. Entre ellos están los de países como Colombia, Panamá, Perú, Argentina, Brasil, Costa Rica, Suiza, Chile, España y Estados Unidos, así como los de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el Parlamento Europeo y otras organizaciones, para quienes el proceso no fue democrático porque limitó la participación de la oposición.
Ante la situación en Venezuela —donde las protestas contra Maduro se han extendido durante semanas y han dejado alrededor de 100 personas muertas—, los diputados del PAN señalan que es prioritario articular esfuerzos para recibir en México a los venezolanos cuya integridad física y libertades estén en riesgo. Además, llaman a imponer sanciones económicas al gobierno de Maduro, quien asumió las riendas de Venezuela tras la muerte de Hugo Chávez en 2013.
Lee: EU impone sanciones económicas directas a Maduro
La administración de Enrique Peña Nieto ha mantenido una postura contraria el gobierno de Maduro. Incluso, ha promovido declaraciones en su contra dentro de la OEA y el fin de semana desconoció la elección de la Asamblea Constituyente . No obstante, de momento ha descartado romper relaciones diplomáticas.
En otra propuesta de punto de acuerdo presentada este miércoles ante la Comisión Permanente, senadores del PRI —el partido del presidente— respaldan dicha posición.
"La represión e intimidación hacia las manifestaciones o cualquier grupo opositor vulnera los derechos humanos de los venezolanos. Por ello, la elección de la Asamblea Nacional Constituyente en Venezuela celebrada el pasado 30 de julio no responde a la demandas de la mayoría de ciudadanos", dice el documento priista.
Los comicios fueron llamados por Maduro para definir al órgano que redactará una nueva Constitución venezolana. Sin embargo, los críticos del mandatario argumentan que busca crear una institución "a modo" para tener una Carta Magna que le sea favorable.
Recomendamos: Los cinco personajes clave de Maduro que escribirán la constitución
En México, sin embargo, el rechazo al gobierno de Maduro no ha sido unánime entre las fuerzas políticas, en particular las de izquierda.
Jesús Zambrano, diputado del PRD y exlíder nacional de dicho partido, se sumó a las críticas contra Maduro y la elección de este fin de semana, aunque consideró que esto no debe ser pretexto para apoyar posibles actos de intervención de países como Estados Unidos.
"La Asamblea Constituyente no puede tener reconocimiento, ni ser digna de legalidad, y mucho menos ser el preámbulo para la cacería de los líderes opositores a su régimen... Venezuela debe regresar al respeto pleno de su constitucionalidad y no generar situaciones de tensión", dijo.
"(Donald) Trump (presidente de EU) es risueño y, si le hacen cosquillas, se verá tentado a hacer gala del intervencionismo que ha caracterizado a los gobiernos de los Estados Unidos, no queremos que eso suceda porque ese sería un elemento más que agudizaría las tensiones políticas existentes hoy en Venezuela y en el cono sur”, añadió.
En tanto, los dirigentes de Morena, el partido fundado por Andrés Manuel López Obrador, han evadido realizar críticas frontales hacia Maduro.
Durante una entrevista con el periodista Jorge Ramos, el propio López Obrador rechazó calificar de dictador a Maduro, argumentando respeto al principio de no intervención y autodeterminación de los pueblos.
null