La Policía Federal detiene a un exalcalde de Guerrero ligado al caso Ayotzinapa
La Policía Federal (PF) confirmó la detención de José Santos Gonzaga Miranda, exalcalde de Cuetzala de Progreso, municipio de la región norte en el estado de Guerrero, por su presunta relación con el crimen organizado y la probable participación en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, hace 19 meses.
En conferencia de prensa, el titular de la División de Inteligencia de la PF, Damián Canales Mena, explicó que el ex alcalde de 65 años de edad, participó en el trasiego y comercialización de droga en Cuetzala, Iguala y Cocula, de acuerdo con las averiguaciones del Ministerio Público federal.
“Se tienen indicios para señalar que Gonzaga Miranda podría estar relacionado con el grupo criminal, que se presume participó en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa”, señaló el informe oficial.
Leer: La ONU pide a México aceptar el acompañamiento de la CIDH en caso Ayotzinapa
El mando federal dijo que también se investiga su probable responsabilidad en el desvío de recursos públicos en el periodo en que fue alcalde, de 2009 al 2012.
La detención del expresidente municipal se dio la mañana de este martes, donde participaron fuerzas de la PF, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Procuraduría General de la República (PGR).
Canales Mena indicó que la investigación duró “varios meses”, y se ubicó a Gonzaga Mena en un domicilio en la colonia Pedregal de Santo Domingo, delegación Coyoacán, en la Ciudad de México.
El titular de la División de Inteligencia afirmó que durante la captura no se efectuó ningún disparo. El detenido fue trasladado a la Subprocuraduría Especializada en Investigación contra la Delincuencia Organizada (Seido) de la PGR, en la Ciudad de México.
Marcha
Miles de personas marcharon el martes en la capital mexicana al cumplirse 19 meses de la desaparición de 43 estudiantes en el sur de México y días después de que un grupo de expertos internacionales denunciara obstáculos del propio Gobierno para averiguar lo que sucedió con los jóvenes.
Portando antorchas con los retratos de los jóvenes desaparecidos la noche del 26 de septiembre del 2014 en la ciudad de Iguala, en el violento estado de Guerrero, simpatizantes y activistas acompañaron a padres de los estudiantes a lo largo de varios kilómetros de las céntricas calles de la Ciudad de México.
"De aquí salió la verdad histórica que ahora sabemos que es una mentira", gritaron algunos al llegar a las oficinas de la fiscalía general, la PGR, en donde detuvieron unos minutos su marcha.
La llamada "verdad histórica" de la fiscalía general fue echada por tierra en septiembre por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que rechazó que los jóvenes hubieran sido quemados en un basurero en Cocula, un pueblo cercano a Iguala, como sigue afirmando el gobierno.
El GIEI presentó el domingo su segundo y último informe tras 14 meses de dar asistencia técnica a la PGR en la investigación denunciando que no lograron establecer cuál fue el destino de 43 estudiantes, posiblemente masacrados, debido en gran medida a fallas y demoras de las autoridades.
Con infrmación de Reuters