“Para el año 2023 se propone continuar con el fortalecimiento de los sistemas de salud estatales para ofrecer de manera directa, gratuita e ininterrumpida los servicios de salud y medicamentos para toda la población, especialmente hacia aquellos grupos que carecen de seguridad social en zonas rurales marginadas y en pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas”, señaló en su carta de motivos el Ejecutivo federal.
López Obrador explicó que una vez terminadas las acciones que se emprendieron con urgencias por la pandemia de Covid, ahora están concentrados en crear “uno de los mejores sistemas de atención médica universal y gratuita del mundo”, por ello continuarán con la aplicación del sistema federalizado IMSS-Bienestar para “hacer realidad el derecho constitucional del pueblo a la salud”.
Para 2022, al programa IMSS-Bienestar se le aprobó un presupuesto de 23,600 mdp, 74% más que el año previo, de acuerdo con la organización México Evalúa. Por lo que en números absolutos, de aprobarse como está previsto, el próximo año recibiría menos recursos.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en 2020, 35.7 millones de personas tenían carencia por acceso a los servicios de salud, de los cuales 15.6 millones reportaron no estar afiliadas, inscritas o tener derecho a recibir servicios de salud en una institución pública o privada.
Actualmente se han firmado convenios de colaboración con al menos 15 entidades en el país, siendo Colima, Nayarit y Tlaxcala los más avanzados.