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Con experto en riesgos, defensa buscó que Murillo Karam dejara el reclusorio

A pesar de los intentos, el exprocurador permanecerá 90 días en prisión preventiva justificada, mientras se desarrolla la investigación complementaria por el caso Ayotzinapa.
jue 25 agosto 2022 01:07 PM
Jesús Murillo Karam
Jesús Murillo Karam

Jesús Murillo Karam, exprocurador general de la Repúbica llegó a la segunda parte de su audiencia vestido con una chamarra y un pantalon beige, propio de los internos del Reclusorio Norte, donde pasará otros 90 días luego de que el juez Marco Antonio Fuerte Tapia determinara vincularlo a proceso por tres delitos en el caso Ayotinapa y en prisión preventiva por 90 días.

Lució cabizbajo, con las manos dentro de su chamarra gran parte de la presentación ante la autoridad judicial, giraba su silla únicamente para hablar al oído con alguno de sus defensores.

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Conforme pasaron las horas se hizo notar su desesperación al recargarse sobre la mesa y llevar los puños a sus mejillas, por momentos llevaba una de sus manos a su frente, como muestra de cansancio.

Pasadas nueve horas de audiencia, aparentemente era la parte final y lo que venía era la discusión de las medidas cautelares, sin embargo, la defensa de Murillo Karam, de último momento, sustituyó a Elba Marina Vázquez una de sus abogadas por Samuel Ibarra, quien de inmediato invocó una medida de prueba consistente en el testimonio de un experto en medidas cautelares.

Tras un breve debate entre la defensa de Murillo Karam y la FGR sobre si debía o no acudir a la sala el experto para rendir su testimonio, el juez lo concedió, por lo que la audiencia se prolongó dos horas y media más. Transcurridas las exposiciones y ese tiempo, el juez determinó que el exprocurador debía de permanecer en el Reclusorio.

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Murillo Karam “el hogareño”

Ante el juez y las partes acudió Cuauhtémoc Vázquez González de la Vega, quien se presentó como abogado con maestría en el sistema penal acusatorio, experto en riesgos procesales y fue servidor público por más de 25 años, diez de los cuales fue en la Procuraduría General de la República cuando Murillo Karam era el titular.

"¿Por qué está aquí?" –preguntó el abogado Samuel Ibarra–, y éste respondió que por un estudio que había realizado sobre el exprocurador en materia cualitativa respecto a factores de riesgo y factores de factibilidad en una medida cautelar con base en testimonios familiares, amigos y reputación de la persona.

Resaltó que del análisis se desprende que Murillo Karam cuenta con factores de estabilidad como el arraigo domiciliario desde hace más de 19 años en su casa de las Lomas de Chapultepec, lleva 30 años de matrimonio, tiene siete hermanos, cuatro hijos, nietos, bisnietos y hasta dos mascotas “a las que quiere mucho”, según su testimonio.

El experto trató de desestimar los dichos de la FGR respecto al riesgo de fuga por su alto poder adquisitivo con el que cuenta el autor de la llamada “verdad histórica” del caso Ayotzinapa, por la posesión de varios inmuebles.

Detalló que actualmente el imputado, si bien cuenta con varios inmuebles, estos se encuentran arrendados; como un departamento ubicado en la calle Edgar Allan Poe de la colonia Polanco en la Ciudad de México, así como dos casas en Pachuca, Hidalgo –estado del que fue gobernador–, entanto una casa en Acapulco, Guerrero se encuentra en proceso de venta.

“No existe riesgo de fuga del señor Murillo Karam, el señor es jubilado desde 2019, vive de sus rentas, no tiene viajes al extranjero, no tiene familiares en el extranjero salvo un sobrino que vive en Inglaterra al que no frecuenta; no tiene vicios, tiene 74 años con enfermedades, es un hombre hogareño”, señaló.

Incluso, Cuauhtémoc Vázquez González de la Vega sugirió al juez que dadas las condiciones, a Jesús Murillo Karam se le podría aplicar una medida cautelar de presentación periódica a firmar ante una autoridad, una garantía económica, la entrega del pasaporte para que no pueda salir del país e incluso la implementación de un brazalete electrónico.

Lo anterior ocasionó la molestia del impartidor de justicia al considerar que, si bien el experto contaba con una basta experiencia en el análisis de riesgos, toda la prueba testimonial fue parcial con la que buscaba encauzar una determinación a favor de Jesús Murillo Karam, para lograr una prisión domiciliaria.

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El exprocurador se queda en el reclusorio.

El juez Marco Antonio Fuerte Tapia determinó que Jesús Murillo Karam mantenga la medida cautelar de prisión preventiva justificada por varias razones:

  • Porque el juez no puede ir en contra de sus propios criterios
  • Porque no puede permitirse el riesgo de sustracción de la justicia
  • Por la relevancia del caso Ayotzinapa.
  • Porque la FGR presentó como prueba la existencia de otro domicilio del imputado en Cuajimalpa.

El juez además tomó como válidas las pruebas que presentó la Fiscalía General de la República consistentes en las distintas conferencias de prensa desde las cuales parten distintas irregularidades en la investigación del caso Ayotzinapa en las que Murillo Karam era el superior jerárquico y por tanto tuvo conocimiento de actos delictivos.

¿Qué viene para el exprocurador?

Durante la audiencia, la FGR pidió al juez seis meses para el cierre de la investigación complementaria, tiempo necesario para recabar testimonios como el de Mercedes Doretti, del Equipo Argentino de Antropología Forense, buscar las grabaciones de drones en el basurero de Cocula, Guerrero, pedir a las compañías telefónicas la sábana de llamadas telefónicas realizadas por el exprocurador y solicitar varios archivos en poder la se Secretaría de Marina.

No obstante, a solicitud de la defensa de Murillo Karam, el juez concedió 90 días corridos a partir del 24 de noviembre para que presenten las pruebas necesarias a favor de su cliente.

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Caso Ayotzinapa Jesús Murillo Karam Procuraduría General de la República

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