Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 iniciaron el pasado 23 de julio. Ese día, más de 160 atletas de la delegación mexicana desfilaron con trajes que portaban bordados tradicionales. Su objetivo: poner en alto el nombre de México.
Pero, una vez más, el desempeño de los atletas se está viendo opacado por los señalamientos que enfrenta la Comisión Nacional del Deporte (Conade), ahora bajo la administración de la exvelocista Ana Gabriela Guevara.
Desde 2019, un año antes de que se suspendieran las Olimpiadas en Tokio a causa de la pandemia, se comenzaron a ver los primeros indicios del problema al interior de la Conade: desde los recortes de becas, hasta la fuga de recursos y de talento.
En 2008, con varias medallas ganadas, Ana Gabriela Guevara se retiró del deporte expresando estar "asqueada del sistema" y la corrupción al interior de la Conade.
Diez años después, en diciembre de 2018, se convirtió en la primera mujer y exatleta al frente de este organismo, lo que en un inicio generó grandes expectativas, aunque pronto llegaron los señalamientos en su contra.
El pasado fin de semana, la clavadista Paola Espinosa causó polémica luego de expresarse en redes sociales sobre el desempeño de las dupla Dolores Hernández y Carolina Mendoza en la prueba de trampolín 3 metros.
"Hoy era mi turno en Tokyo 2020. No hubo medalla para México. Lamento que no nos hayan dejado pelear el podio junto a Melany Hernández, como dueñas de la plaza 3m sincro, medallistas mundiales y estar entre esas ocho parejas mundiales, les dimos el diploma olímpico. Era tan viable", escribió Espinosa en Twitter.
Su comentario fue criticado por usuarios de la red social y por deportistas mexicanos al considerar que debía manifestar su apoyo hacia las clavadistas, no minimizar su desempeño, pero ¿qué hubo detrás de esto?
El 17 de junio de este año, la Federación Mexicana de Natación (FMN) publicó la lista de los representantes nacionales para la justa olímpica, en la que, señaló, se respetaron los resultados del control técnico. En esa lista no figuró el nombre de Paola Espinosa, campeona mundial y panamericana.
La medallista acusó directamente a Ana Guevara por haber quedado fuera de los seleccionados. Señaló que ya se había ganado una plaza en la justa olímpica al obtener el tercer lugar en el Campeonato Mundial de Clavados de Gwangju 2019, junto con Melany Hernández.
"Yo hablé de frente con la directora de la Conade y me dijo que sí, que me iban a dar mi lugar y al final no me lo dieron. En todos los procesos olímpicos, quien se ganaba su lugar con medalla (en pruebas sincronizadas) se iba directo a los Olímpicos (...) No voy a Juegos Olímpicos cumpliendo todo lo que pidió la Conade", dijo en ese entonces a Radio Fórmula.
Paola Espinosa fue una de las deportistas mexicanas que en 2019, ante los primeros señalamientos, abogó por el trabajo de Guevara en la Conade, por quien pidió el voto de confianza considerando que "está haciendo bien las cosas" y que buscaba cambiar las que antes "no funcionaban correctamente".
Hoy, ante las críticas que la clavadista recibió por su comentario sobre la dupla que representa a México, Ana Guevara señaló que fue "lamentable", "desatinado" y "muy poco productivo", sobre todo porque, dijo, Espinosa es medallista olímpica y sabe lo que genera una expresión de ese tipo.
"Lamentable, ahora sí que se respeta la individualidad de cada quien, cuáles son sus puntos de vista y como dice el dicho 'cada quién cuenta como le va en el baile', pero creo que aquí no se esperaba una reacción de este tipo y más tratándose de quien estuvo en un escenario, en donde se sabe lo costoso que llegar aquí", dijo la titular de la Conade.
Paola Espinosa no es la única que acusó a su federación y a la Conade por el proceso de selección. La ciclista Jessica Salazar también fue excluida por "argumentos técnicos".
Ana Gabriela Guevara confía en que México romperá récord histórico en Tokio y ganará 10 medallas. Hasta este momento, la delegación ha logrado dos de bronce: una por tiro de arco mixto, y otra por clavados sincronizados.
En el primer día de las competencias, México pudo haber ganado su primera medalla de plata con Gabriela Bayardo Schlosser en el tiro con arco mixto, pero dio la presea a Países Bajos.
Gabriela Bayardo Schlosser se mudó a Países Bajos en 2018 por decisión personal. A diferencia de la esgrimista Paola Pliego, quien renunció a seguir representando a México acusando "intereses oscuros" de las autoridades deportivas mexicanas; ahora está con Uzbekistán.
Damián Villa (taekwondo), Linda Ochoa (tiro con arco), Jonathan Ruvalcaba (clavados) y Kevin Chávez (clavadista) también dejaron de representar a México tras denunciar irregularidades en el procesos de selección de la Conade en esta y en administraciones pasadas.
Ya en Tokio, Ana Gabriela Guevara es vista en los sitios donde compiten los atletas mexicanos, pero, de acuerdo con los medios especializados en deporte, se hace presente solo donde hay más oportunidades de una medalla.
Tal como ocurrió el 25 de julio en el Centro Acuático de Tokio, al que asistió para ver la prueba de clavados en la que participaron Dolores Hernández y Carolina Mendoza, quienes después de tres rondas, iban en último lugar, por lo que la directora de la Conade se fue.
A esto se suma el hecho de que los atletas que están representando a México han manifestado su inconformidad por los uniformes que les envió la Conade, un problema que, dijo Guevara, se presenta en cada competencia olímpica.
"Es un poco incómodo notar el no agrado de los atletas con la ropa, venimos a un clima muy húmedo en donde mayormente se les debió haber proveído de ropa corta y facilitar los tiempos (...) Siempre ha sido el clavito de los uniformes, pero hay que darle para adelante y solucionar con lo que se pueda", dijo la comisionada al respecto.
Si bien es cierto que Ana Gabriela Guevara heredó una Conade con irregularidades respecto de la aplicación de recursos, las acusaciones por un mal manejo empiezan a recaer directamente en ella.
Al inicio de su administración, Guevara prometió que en seis meses ya se estaría corrigiendo todo lo hecho y no hecho en la Conade. "Tengo que hacer referencia al pasado porque estamos recibiendo la caca del pasado, no podemos llamarlo de otra forma", expresó en 2019 durante su comparecencia ante la Comisión de Juventud y Deporte del Senado.
En esas mismas fechas, la Secretaría de la Función Pública (SFP) dio a conocer que abrió cuatro expedientes de investigación contra la Conade por presuntos actos de corrupción en el Fideicomiso del Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar) detectados desde la administración de Alfredo Castillo. Hasta ahora no se ha informado el estatus de esas averiguaciones.
Las auditorías realizadas por SFP revelaron diversas irregularidades por 50.8 millones de pesos.
Guevara precisó que entre estas observaciones destacan que: la Conade no proporcionó los expedientes de los deportistas; tampoco presentó evidencia de empleo de recursos; no hizo una evaluación técnico-metodológica para la dictaminación de la viabilidad de las solicitudes de apoyo hacia los deportistas; y no implementó mecanismos de control para los expedientes de los becarios.
Eso fue lo último que se supo del caso. Por ello, en octubre de 2020, el senador Casimiro Méndez Ortiz (Morena) solicitó una nueva comparecencia de la titular de la Conade para que informara sobre las observaciones de la SFP hechas a su administración.
El legislador mencionó que la Conade de Ana Guevara ha sido continuamente señalada por deficiencias administrativas que afectan directamente a los deportistas, presuntos actos de corrupción y conflictos de interés. La comisionada del deporte no ha sido citada a rendir cuentas.
Apenas en febrero pasado, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó más de 186 millones de pesos por aclarar en el ejercicio del gasto público de la Conade. El tercer informe de la Cuenta Púbica de 2019 reveló irregularidades en el programa Atención al Deporte, principalmente en el pago de servicios que no se realizaron y posibles sobornos para adjudicar contratos.
De acuerdo con la auditoría forense, la Conade no presentó documentación que acreditara la ejecución de servicios contratados por un monto de 57 millones 896,000 pesos y se encontraron inconsistencias en la documentación para acreditar control, supervisión y verificación de servicios por un monto de 100 millones 808,000 pesos, entre otras.
