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Ante tercera ola, piden a autoridades no relajar medidas como el distanciamiento

Especialistas ven conjunto de factores en el inicio de la tercera ola; destacan el relajamiento de medidas, mayor movilidad, la falta de vacunación en jóvenes y la llegada de la variante Delta.
mar 13 julio 2021 06:20 AM
CDMX con COVID
El tercer incremento de la epidemia de COVID-19 no ha significado nuevas restricciones.

En un mes, el incremento de la epidemia de COVID-19 pasó de 0.5% a 19%. Apenas había pasado solo una semana después de las elecciones del pasado 6 de junio, y se registraban 2 millones 452,469 casos positivos y 230,095 decesos, cuando las cifras comenzaron a subir. Todo parecía estar controlado, pero la actividad viral aumentó, lo que se reflejó en más contagios y hospitalizaciones, sobre todo entre los jóvenes, quienes están en espera de la vacuna.

Especialistas alertan que el relajamiento de medidas, la llegada de variantes del virus SARS-CoV-2, la baja cobertura de vacunación en jóvenes y el mantener las medidas de movilidad, han generado un ‘cóctel’ de elementos que derivan en la tercera ola, pero consideran que aun cuando las autoridades han sido un tanto “irresponsables” y no han mandado mensajes claros para que la población tome más consciencia de la situación, se puede evitar una tercera ola con la intensidad de las anteriores, si cada uno es responsable.

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“Me parece una actitud irresponsable, no solamente del gobierno federal y local de cada estado sino de cada individuo, si estamos viendo que el semáforo continua cierto a ritmo, es una actitud individual, responsabilidad propia, reforzar, desarrollar esta responsabilidad humana de no esparcir el contagio”, dice la académica de la Universidad La Salle y experta en Medicina , Jessica González.

No es de estar preocupados sino de estar ocupados, hacer promoción y prevención de la salud. Estamos a tiempo de prevenir que esta tercera ola no se dispare tanto como se disparó la primera y la segunda, si hacemos consciencia individual que nos lleve a la colectiva.
Jessica González, académica de La Salle.

La consultora en salud pública Carolina Gómez Vinales atribuye el repunte de las últimas semanas a “una mezcla de todo”, incluso desde lo que considera una decisión política al colocar a la Ciudad de México, una de las entidades con mayor aumento, en semáforo verde antes de la jornada electoral para dar seguridad a los habitantes de salir a votar e incluso el regreso a clases en algunos planteles.

“Creo que todo ha sido sin un plan y todas esas condiciones encadenadas unas a otras, que se permitió la movilización y la congregación de personas, es un cóctel de elementos que generaron esta nueva crisis”, dice.

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Tras la segunda ola de principios de año, donde los servicios de salud se vieron presionados ante el incremento de casos y hospitalizaciones, la tendencia había ido a la baja hasta la primera semana de junio cuando justo la curva comenzó a subir.

Actualmente, las entidades con mayor tasa de incidencia por cada 100,000 habitantes son Baja California Sur (269), la Ciudad de México (135), Quintana Roo (109), Tabasco (79) y Yucatán (71).

Tercera ola
Así va la tercera ola en México.

La académica de La Salle señala que estados tienen algo en común: el turismo, ya que son lugares donde la gente va a descansar, salir de la rutina, con la finalidad de distraerse, y donde finalmente se tiene que dar la reactivación económica. “Hay tanta necesidad de reactivar la economía que las medidas se dejaron de lado”, comenta.

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Se refiere en especial a las playas, donde ya se han visto casos como el de los jóvenes de Puebla que fueron a festejar su graduación a Cancún , en Quintana Roo, y varios de ellos regresaron contagiados.

En el caso de la capital, las especialistas lo atribuyen en parte a que aun con el aumento de casos, las actividades no se han frenado, como en los meses anteriores, ni el aforo de los centros de entretenimiento reducido, que sumado a que los jóvenes principalmente han relajado medidas, y la llegada de las variantes, como Delta –que se estima es más transmisible en 60%– , hacen posible una tercera ola con picos como los del pasado.

“Esos son los factores que están influyendo, especialmente entre los jóvenes, en esta tercera ola. Podríamos llegar a los picos de la primera ola o los de diciembre, si nos descuidamos y no empezamos a retomar todas estas medidas de cuidado y prevención, podríamos estar ante una tercera ola como las que ya vivimos”, asegura González.

Ve también: ¿La variante Delta de COVID es la causa de la tercera ola en México?

De acuerdo con la Secretaría de Salud, en las últimas semanas se ha visto un incremento en los contagios en las personas de 18 a 39 años, quienes apenas están en su proceso de vacunación. Hasta la fecha cuatro de cada 10 mexicanos cuentan con al menos una dosis, según el gobierno federal, aunque en esquemas completos, la cifra baja significativamente.

En una reunión con gobernadores la semana pasada, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell reconoció que la vacunación contra COVID-19 ha generado un “cambio en el perfil demográfico en la epidemia por COVID”, al registrarse la disminución de casos graves en personas de 60 años y más, pero un aumento en los jóvenes.

“Esta modificación en el desplazamiento de la edad de las personas afectadas por la epidemia no quiere decir que se volvió más agresiva en jóvenes, sino que la virulencia se redujo en personas adultas mayores como resultado de la vacunación”, señaló.

Por su parte, Gómez señala que no se puede atribuir todo a la vacunación, pues éstas lo único que van a evitar es casos graves de COVID y que se ingrese a hospital, pero es evidente que los casos van a seguir ocurriendo.

“Ya se incrementó el registro de ocupación hospitalaria, lo que es indicativo de que podríamos estar otra vez ante una pandemia sin control, siendo que los jóvenes buscan sitios recreativos o salen a trabajar, y continúan con sus actividades”, dice.

En la reunión del jueves pasado, López-Gatell Ramírez explicó que entre el 1 de enero y el 16 de junio, los casos hospitalizados graves disminuyeron de 25 a 14% en personas de 60 a 69 años; en cambio, la proporción subió de 7 a 17% en el grupo de 30 a 39, por lo que urgió a las entidades federativas en ascenso, a mantener la capacidad de aumentar la disponibilidad de camas, lo que implica equipos humanos y tecnológicos, como ventiladores, monitores y bombas de infusión.

Hasta el 11 de julio, Baja California Sur registra la ocupación hospitalaria de camas generales más alta con 69.65%. Respecto a camas con ventilador, también es el estado con mayor ocupación con 55.37%, seguido de Yucatán con 51.87%, en tanto que de camas con ventilador en Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), Nayarit reporta una ocupación de 100%, seguido de Yucatán con 72.22% y Sonora con 53.12%.

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