“En el periodo de 2000 a 2020 se han identificado 211 casos importados o asociados a importación, incluidos los 10 casos identificados –hasta el 13 de marzo– por el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica en el 2020 en la Ciudad de México”, dice un documento de la Comisión Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (CONAVE).
El otro brote epidémico
El sarampión tiene un R0 (reproductivo básico o capacidad de contagio) de 18, es decir, que un infectado puede contagiar hasta 18 personas más, mientras que el COVID-19 tiene un R0 de 2.5.
Aunado a esto, se han reportado coberturas bajas de vacunación respecto al sarampión. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cobertura ideal es de 95%, no obstante hasta 2018, estaba por debajo del 90%.
“El R0 y las coberturas bajas son la respuesta a por qué tenemos tantos casos”, dice el epidemiólogo de la UNAM, Oscar Sosa, quien explica que aunque el sarampión es más contagioso que el COVID-19, en éste último no existe una vacuna por eso hay que tener más cuidado.
El aumento de casos no es exclusivo de México. Incluso el pasado 13 de marzo, el gobierno federal emitió un “aviso epidemiológico” por la situación. En el documento explica que desde el 1 de enero de 2019 al 24 de enero de 2020 se notificaron 20,430 casos confirmados y 19 defunciones, en 14 países del continente americano.
- Brasil (18,073 casos, incluidas 15 defunciones)
- Estados Unidos (1,282 casos)
- Venezuela (548 casos, incluidas 3 defunciones)
- Colombia (242 casos, incluida 1 defunción)
- Argentina (114 casos)
- Canadá (113 casos)
- México (20 casos)*
- Chile (12 casos)
- Costa Rica (10 casos)
- Uruguay (9 casos)
- Perú (2 casos)
- Cuba (1 caso)
*Son los 20 registrados en 2019.