El huracán “Ágatha”, primero de la temporada de ciclones 2022, azotó a inicios de este mes al Pacífico mexicano, particularmente las zonas más pobres de Oaxaca, cuyos habitantes siguen padeciendo las afectaciones.
“Ágatha” dejó 11 muertos y más de 30 desaparecidos en Oaxaca, además de causar severos daños en al menos 77 escuelas, lo que podría acentuar el rezago educativo en el estado, que de por si ya se ubica en 29.6%, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Un golpe a la educación
El Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe) informó que, de los 2,000 espacios educativos ubicados en las zonas más pobres de Oaxaca, 77 tienen severos daños tras el paso del huracán.
Las 77 escuelas que afectadas están en los 38 municipios donde el gobierno federal emitió una declaratoria de emergencia que se ha extendido hasta dos semanas después del paso de “Ágatha”.
Gran parte de estos municipios se encuentran en la Sierra Sur, como Asunción Tlacolulita, Candelaria Loxicha, San Agustín Loxicha y San Bartolomé Loxicha, que juntos tienen una población de apenas 40,307 habitantes, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi, 2020).
Del total de la población en estos municipios, 16,040 personas tienen rezago educativo, tal como apuntan los cuadernos del Informe anual sobre la situación de pobreza y rezago social 2021 de la Secretaría de Bienestar.
Con “Ágatha”, otros 658 niños, niñas y adolescentes han dejado de asistir a las escuelas por los daños causados. Además, 58 docentes han dejado de atender en las comunidades del estado con mayor rezago social, de acuerdo con la Secretaría de Educación Pública.
El resto de las y los 17,000 alumnos de los centros del Conafe en Oaxaca, donde prestan servicios 1,900 educadores comunitarios, continúan sus actividades normales.
La estrategia para el rescate
La Secretaría de Educación Pública (SEP) manifestó esta semana que se está llevando a cabo una estrategia para recuperar el 100% de los planteles afectados.
Aunque para ello, primero tendrán que ser evaluados conforme al nivel de daño para definir el plan de acción para el restablecimiento del servicio.
En tanto que la Coordinación Territorial para el Servicio Educativo es la encargada de implementar los planes conjuntos con los gobiernos estatal y municipales para recuperar la totalidad de los espacios a la brevedad posible.
Por ahora, autoridades estatales, integrantes de las comunidades y personal del Conafe trabajan en el levantamiento de información de daños de las escuelas siniestradas.
La Coordinación también reconoce el trabajo de madres y padres de familia, quienes han ayudado a limpiar las escuelas, igual que docentes comunitarios y personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que también ha hecho llegar alimentos a las localidades afectadas.