El candidato del PRI en Puebla niega que el caso Marín afecte su campaña
PUEBLA, Puebla (ADNPolítico).- El candidato del PRI a gobernador de Puebla, Alberto Jiménez Merino, consideró que la orden de aprehensión contra su amigo y exmandatario local, Mario Marín, señalado del delito de tortura contra la periodista Lydia Cacho, no afecta su campaña.
“Cada quien es responsable de sus actos y de sus consecuencias”, dijo este miércoles en entrevista telefónica con ADNPolítico, en la que también desmintió las versiones en el sentido de que la búsqueda judicial de Marín esté provocando cambios en su equipo.
Luego de que este miércoles se confirmó que existe una orden de aprehensión contra el exgobernador, se difundieron señalamientos que apuntaban a que Jiménez Merino había cesado a su coordinador de campaña, Valentín Meneses, quien en 2006 era el vocero de Marín.
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“No tengo ni encuentro ninguna relación con esta noticia. Yo sigo promoviendo un nuevo comienzo para buscar la gubernatura del estado de Puebla”, insistió el candidato este miércoles.
“No tendría por qué (afectar mi campaña). Yo abandero un nuevo comienzo y estoy buscando ser gobernador de Puebla con un gran ánimo, con un gran entusiasmo. En eso estoy concentrado”, añadió.
Priistas cercanos
Jiménez Merino y Marín son políticos cercanos. Incluso, el abanderado ha llegado a decir anteriormente que él no niega a sus amigos, cuando ha sido cuestionado por los señalamientos contra el exgobernador por violaciones a los derechos humanos de Lydia Cacho.
Marín acudió a su arranque de campaña, en el que dijo que ese caso de 2005-2006 “ya debe olvidarse”.
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Cuestionado sobre la posibilidad de que esta situación provoque cambios en su equipo, el priista respondió: “(Son) puras suposiciones de mentes perversas. Desconozco cuáles sean las fuentes, pero esta campaña crece con gran intensidad. Hay una gran aceptación. Alberto Jiménez Merino jamás ha sido un corrupto, ha sido una persona de servicio, es de origen humilde, tiene trabajo, trayectoria, (ha sido) maestro universitario”.
“No hay ningún cambio en el equipo de trabajo, todos están atendiendo sus responsabilidades con normalidad. Y bueno, quien podría informar sobre cambios sería el Comité Ejecutivo Nacional, pero Alberto Jiménez Merino, hoy, tiene una candidatura legítima, que no se está ventilando en ningún tribunal”, dijo.
Barbosa y Cárdenas exigen justicia
Entrevistados por separado sobre el tema, los otros candidatos a gobernador coincidieron en exigir que, aunque sea 13 años después, se le haga justicia a Lydia Cacho, quien fue torturada por policías de Puebla durante la administración de Marín (2005-2011).
“¿Cómo es que Mario Marín comienza a aparecer públicamente? ¿Será que ya sabía eso (de la orden de captura) y quiso aparecer públicamente, apostando a que no pasara nada?”, cuestionó Miguel Barbosa, de Juntos Haremos Historia (Morena-PT-PVEM), quien incluso ofreció a las autoridades federales su colaboración para dar con el exgobernador.
Enrique Cárdenas, del bloque PAN-PRD-MC, lamentó que este caso tenga más de una década en la impunidad.
“Es increíble que hayan tenido que pasar 13 años para que se haga cumplir justicia”, dijo.