Martí Batres, secretario de gobierno de la Ciudad de México, afirmó que este espacio perteneció a la época del colonialismo y por ello es importante que sea colocado un símbolo que reivindique a las mujeres indígenas.
Sin embargo, ante la insistencia de grupos feministas que solicitan que la antimonumenta de las Mujeres que Luchan se mantengan en este sitio, el funcionario señaló que hay diálogo para llegar a un acuerdo para su reinstalación.
“Es una iniciativa muy importante la de la mujer Amajac que reúne varios simbolismos, es una reivindicación de la mujer, es una reivindicación de las comunidades indígenas, antimachista y anticolonialista justo en el sitio donde había un símbolo colonialista”, explicó.
Luego de la marcha que este 12 de octubre llevaron a cabo al menos 8,000 mujeres indígenas del Ángel de la Independencia a la exglorieta de Colón, donde pidieron la instalación de la estatua de la joven Amajac, la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum aseguró que este símbolo es importante, no solo para la Ciudad de México, sino para todos los pueblos y barrios originarios que sufrieron agravios en la época de la Conquista.
“La idea de que haya una mujer indígena ahí donde estuvo Cristóbal Colón, tiene que ver con un reconocimiento de la historia de nuestro país, y un reconocimiento de las mujeres que históricamente son las más silenciadas”, dijo.
Sheinbaum agregó que se mantendrá el diálogo con las colectivas feministas que piden que está glorieta sea renombrada, sin embargo, descartó que ambas estatuas puedan convivir en el mismo sitio, por lo que buscarán llegar a un acuerdo para la reinstalación de la antimonumenta.
La mandataria capitalina reveló que en el caso de la estatua de Cristóbal Colón, se mantiene en restauración por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia, pero su instalación en un parque de la alcaldía Miguel Hidalgo se mantiene en pausa ya que las autoridades de la demarcación no permitieron que ello ocurriera.