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El Valle de México tuvo solo 97 días de aire limpio, pese a la baja en movilidad

La Termoeléctrica de Tula, la industria, el transporte, los incendios, así como la contaminación por residencias, comercios y servicios, entro otras causas, dejaron 208 días con mala calidad de aire.
lun 18 enero 2021 06:17 AM
Para este jueves el el monitoreo de la Calidad de Aire de la Zona Metropolitana del Valle de México alcanzó un índice máximo de 104  lo que representa un alto nivel de contaminación.
El Valle de México tuvo sólo 97 días de aire limpio en 2020, frente a la reducción de la movilidad y suspensión de actividades por la pandemia de COVID-19.

Los habitantes del Valle de México respiraron aire limpio sólo 97 días del 2020, sólo una cuarta parte de todo el año, pese a que la Ciudad de México pausó su ritmo ante la pandemia de COVID-19.

El llamado al confinamiento para reducir los contagios provocó la disminución de los vehículos circulando en las avenidas de la Ciudad de México: entre abril y junio el tránsito se redujo 68% en promedio, mientras entre julio y agosto la reducción pasó a ser del 32%, pero esto no tuvo el mismo efecto en el aire de la metrópoli.

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La Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) capitalina informó que la ciudad atravesó la “temporada de ozono” entre marzo y mayo sin que se activara la contingencia ambiental, ante la reducción de 45% en el monóxido de carbono y 34% en el dióxido de nitrógeno, componentes que participan en la formación del ozono.

Sin embargo, durante el resto del año la contaminación persistió pese al cierre de actividades por la pandemia de COVID-19 y la ciudad registró la única contingencia ambiental del 2020 por altos niveles de ozono el 11 de noviembre.

Los habitantes del Valle de México vivieron un total de 208 días con niveles superiores a los rangos considerados seguros de ozono, contaminante que tiene un 57% de origen en residencias, comercios y servicios –fugas de gas LP, combustión incompleta en estufas y calentadores, y el uso de productos como pinturas, perfumes, plaguicidas, lacas, en otros productos–, 17% en el transporte, 8% en la industria y un 18% en otras causas, de acuerdo con datos de Calidad del Aire del Gobierno de la CDMX.

En el caso de las partículas suspendidas, fueron 119 días con altos niveles de PM10, con un tamaño igual o menor a 10 micrómetros, partículas que tienen 53% como causa el transporte, 8% la industria, 3% en residencias, comercios y servicios, y 36% en otras actividades.

Mientras de PM 2.5 se registraron altas concentraciones durante 26 días del año, partículas con un tamaño igual o menor a 2.5 micrómetros, cuyo origen está vinculado en 56% con el transporte, 13% con la industria, el 4% con residencias, comercios y comercios, y 27% con otras causas.

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La reducción de la contaminación del aire ante la pandemia en 2020 ocurrió sólo durante un breve periodo en los primeros meses del confinamiento sin un impacto a mediano o largo plazo, explica Carlos Samayoa, coordinador de Movilidad Sustentable en Greenpeace México.

En un principio cuando se establecieron las medidas de confinamiento y se redujo la movilidad de vehículos se tuvieron disminuciones muy moderadas, sin embargo no podemos hablar de un cambio radical en las emisiones de contaminantes".
Carlos Samayoa, coordinador de Movilidad Sustentable en Greenpeace México.

“Haciendo un recuento del año tuvimos pocos días con buena calidad del aire y nos deja en evidencia que hacen falta medidas para acercarnos a una disminución considerable que pueda tener un efecto en la salud humana”, señala Samayoa a Expansión Política.

Entre las causas de la persistencia de la contaminación en el Valle de México está una reducción de movilidad sólo momentánea, así como la industria.

La termoeléctrica de Tula, Hidalgo, alimentada por combustóleo, fuente de emisiones de azufre hacia el centro del país, es un elemento de contaminación del aire que no se ha detenido durante la pandemia, según explica Victor Hugo Páramo, director de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe).

“Por ejemplo alrededor de la Zona Metropolitana del Valle de México, el Valle de Toluca, cuenca de Tula, incluso tenemos el volcán, es fuente importante de contaminantes.

“Algo que es mucho más visible, que nos pega son los incendios forestales, ya sea alrededores, incluso a larga distancia, cuando hay incendios en la península de Yucatán, en Centroamérica, los satélites claramente se puede ver cómo llega el humo”, detalló en entrevista con Expansión Política.

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Por su parte el representante de Greenpeace recordó que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) alrededor de siete millones de personas mueren al año en el mundo por causas relacionadas con la contaminación del aire.

“Es necesario hacer una transición para desplazar las tecnologías con base en combustibles fósiles”, comentó.

El director de la CAMe explicó que en la última semana de mayo, gracias a la reducción de la actividad, bajó en un 52% la concentración de CO2, que está ligado a los coches. No obstante no disminuyó tanto el monóxido de carbono y las partículas PM10 y PM2.5 bajaron solo 3%, lo que quiere decir que hay muchas actividades además de los vehículos están emitiendo partículas.

Jorge Baruch, vocero de la Comisión para el COVID-19 de la UNAM, explicó que la contaminación aumenta el riesgo ante el virus del SARS-CoV-2 que justo provoca una enfermedad que ataca el sistema respiratorio.

Las personas que padecen enfermedades respiratorias son susceptibles a generar complicaciones con mayor rapidez cuando se exponen sostenidamente a una mala calidad del aire".
Jorge Baruch, vocero de la Comisión para el COVID-19 de la UNAM.

“Las partículas finas de contaminantes PM2.5 y PM10, el ozono también, son factores que incrementan la inflamación del sistema cardiopulmonar y con ello pueden adelantar la mortalidad en personas que tienen una complicación aguda”, explica el experto a Expansión Política.

Samayoa señala que la contaminación no conoce límites políticos y afecta a todo el Valle de México, por lo que es una responsabilidad compartida entre el Gobierno de la Ciudad de México, federal y del Estado de México.

“Estamos en una situación donde no nos podemos dar el lujo de aumentar la demanda hospitalaria por la misma crisis sanitaria que estamos enfrentando”, aseguró.

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