'El Bronco' asume en NL ante el reto de cumplir con las expectativas

Después de ganar las elecciones de junio pasado con la mitad de los votos y de captar la atención dentro y fuera de México, Jaime Rodríguez Calderón, el Bronco, asume este domingo el cargo de gobernador de Nuevo León, con el reto de cumplir con las expectativas que ha generado su condición como primer candidato independiente en conquistar un gobierno estatal. 

Rodríguez Calderón tomará las riendas de la entidad del norte del país de manos de Rodrigo Medina, un militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a quien prometió investigar luego de que empresarios y políticos locales lo han acusado de cometer actos de corrupción. 

Gustavo López Montiel, politólogo del Tecnológico de Monterrey, consideró que uno de los principales retos del nuevo gobernador será, precisamente, investigar a la administración de Medina. 

"Es uno de los temas más importantes, que él ubicó como fuente de su legitimidad", dijo el académico a CNNMéxico. 

En una entrevista con Grupo Expansión realizada en agosto, Rodríguez Calderón señaló que no solamente investigará a Medina sino a sus colaboradores cercanos, aunque declinó adelantar si habrá o no sanciones para el mandatario saliente. 

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Otro reto que enfrentará el nuevo gobernador, según López Montiel, será integrar un gabinete que pueda entablar alianzas con los partidos políticos dentro del Congreso local, pues únicamente de esa forma logrará impulsar y concretar sus iniciativas. 

César Montemayor Zambrano, presidente en Nuevo León de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), explicó que si bien los empresarios no esperan que los problemas del estado se arreglen "de la noche a la mañana", sí estarán muy pendientes del arranque de la gestión de Rodríguez Calderón, y piden austeridad y transparencia. 

"En los primeros 100 días, pues esperamos que empiecen a meter orden en las finanzas públicas, eliminando y fusionando secretarías que tienen funciones redundantes", dijo en entrevista. 

"No esperamos grandes obras, ni nada espectacular, esperamos que lleguen y empiecen a poner orden (en el ejercicio del gasto)", agregó. 

¿Y la inseguridad?

La seguridad es otro pendiente. El Pulso Metropolitano de Seguridad, una encuesta reciente levantada entre agosto y septiembre, señaló que solamente 17% de los habitantes de la entidad se siente más seguro respecto de meses previos.

"Si algo aprendimos en 2010 en Nuevo León (el peor momento de inseguridad) fue nunca relajar el combate a la inseguridad. Entonces yo esperaría que ellos piensen lo mismo", dijo a CNNMéxico Eduardo Garza, director del Centro de Integración Ciudadana (CIC), una de las organizaciones civiles que coordinan el estudio.

Además, consideró que tres prioridades del futuro gobierno en este tema deben ser mantener a la Fuerza Civil (nueva policía estatal), mejorar la coordinación con los alcaldes y sus policías, y reforzar la seguridad en los municipios rurales. 

Administración 2015-2021

Rodríguez Calderón ganó los comicios del pasado 7 de junio —con el doble de votos que sus más cercanos contendientes— luego de una campaña en la que prometió acciones como ahorrar recursos públicos reduciendo la burocracia estatal, combatir la corrupción, dar apoyos a sectores como los estudiantes y las madres de familia, y detener el polémico proyecto del acueducto Monterrey VI.

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Para ello, según ha explicado él mismo, escuchará propuestas de ciudadanos y académicos, y tendrá como su mano derecha a Fernando Elizondo Barragán, un exmilitante del Partido Acción Nacional (PAN) que en la contienda compitió por Movimiento Ciudadano (MC) y declinó a favor de Rodríguez Calderón a pocos días de la votación. 

Cuando se anunció la declinación , también se dio a conocer que el acuerdo entre ambos hombres es que Elizondo funja como jefe de gabinete del nuevo gobernador. 

Rodríguez Calderón, expriista, asume el gobierno de un estado con 5 millones de habitantes y con alto desarrollo económico. Lo hace cuando ya en algunas encuestas aparece como posible candidato a la presidencia en las elecciones de 2018, aunque los analistas advierten que esas eventuales aspiraciones dependen de cómo sea su desempeño como mandatario estatal. 

Para López Montiel, el que Rodríguez Calderón haga un mal trabajo incluso tendría un impacto en las intenciones de otros candidatos independientes por buscar cargos públicos. 

"(Esto) se vería como el hecho de que (los independientes) no fueron capaces de construir vínculos de legitimidad con respecto al gobierno y de gobernar como tal", consideró.

Arturo Ascención y Darío Martínez Brooks contribuyeron con este reporte.