Aureoles contará con exgobernadores para que lo aconsejen en Michoacán

Silvano Aureoles Conejo no quiere estar solo en la misión de gobernar Michoacán. 

Además de buscar a integrantes de otras fuerzas políticas, como al excandidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, el gobernador electo ha hecho un llamado a exgobernadores de la entidad para que sean sus consejeros.

Se trata de políticos que en su mayoría son priistas. El perredista Aureoles quiere que le ayuden a tomar decisiones en los momentos difíciles de su mandato.

Entre los que serán parte de este consejo de exgobernadores se encuentran Fausto Vallejo Figueroa (PRI), Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (PRD), Ausencio Chávez (PRI), Víctor Manuel Tinoco Rubí (PRI), Genovevo Figueroa Zamudio (PRI) y Carlos Torres Manzo (PRI), entre otros.

Con cada uno de ellos se ha reunido en privado y les ha explicado que serán parte de un grupo con voz y voto, y que aportarán sus experiencias y visión política.

La mayoría ha confirmado su participación.

Falta el exgobernador perredista, Leonel Godoy Rangel, con quien se dice tiene serias diferencias políticas y personales, aunque Aureoles Conejo indica que aún no ha sido invitado porque no han podido coincidir al tener una agenda “apretada”. 

"De los exgobernadores tomaré sus experiencias buenas y malas; en ellos me apoyaré para las decisiones difíciles y les tomaré parecer para saber cómo manejarían tal o cual situación, y cómo harían ellos si estuvieran en mi lugar", comentó Aureoles. 

La mayor parte de los exgobernadores priistas no cuenta con la simpatía del PRD, sobre todo los del ala dura de este partido, al que pertenece Aureoles Conejo.

Los fundadores del PRD aseguran que muchos de ellos "persiguieron perredistas y robaron elecciones".

Así lo considera el exsenador Cristóbal Arias Solís, fundador del PRD y eterno aspirante a la gubernatura de Michoacán, quien se enfrentó en las urnas a los priistas Genovevo Figueroa Zamudio y Víctor Manuel Tinoco Rubí.

Aureoles Conejo no ha dado mayores detalles pero también ha mencionado que hará un ejercicio semejante con otros actores de la política, como sus  excontrincantes en el pasado proceso electoral.

Por lo pronto ya se reunió en privado con la senadora y excandidata del PAN, Luisa María Calderón Hinojosa. Con su excontrincante del PRI y también senador, Ascención Orihuela Bárcena, no se ha dado a conocer que haya tenido ningún acercamiento.

A continuación te presentamos un recuento sobre quiénes son los exgobernadores invitados para darle consejos a Aureoles. 

Carlos Torres Manzo (Del PRI)

Gobernó Michoacán de 1974 a 1980. Disputó la candidatura a la gubernatura del estado con Cuahutémoc Cárdenas Solórzano, quien en ese entonces también militaba en el PRI.

Tuvo una enemistad política y personal con Cárdenas, quien a la postre dejaría el priismo para fundar el PRD. 

Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano  (Sin partido)

Fue electo gobernador del estado de Michoacán en 1980, cuando aún militaba en el PRI. 

Como mandatario estatal decretó la prohibición de apuestas de cualquier tipo, comenzando por las peleas de gallos; cerró zonas de tolerancia en todo el estado y municipalizó el transporte urbano; también en su gestión fueron desaforados tres diputados locales por promover la venta de automóviles procedentes de Estados Unidos, y reconoció por primera vez en la historia el llamado “voto del círculo blanco”, lo que permitió que hubiera ayuntamientos independientes.

Fausto Vallejo Figueroa (Del PRI)

Rindió protesta como gobernador en febrero de 2012, luego de un cuestionado proceso electoral que estuvo bajo la presión del crimen organizado.

En abril de 2013 pidió la primera licencia al Congreso del estado para ausentarse de su puesto argumentando problemas de salud, y 14 meses después solicitó licencia definitiva luego de que en las redes sociales circulara una fotografía de su hijo menor, Rodrigo Vallejo Mora, reunido con el líder criminal Servando Gómez la Tuta.

Durante el proceso electoral de junio pasado mostró apoyo total y abierto a Aureoles Conejo, lo que estuvo a punto de confrontarlo con el candidato de su partido,  Ascención Orihuela Bárcenas, quien a su vez lo acusó de traidor y pidió su expulsión. 

Víctor Manuel Tinoco Rubí (Del PRI)

Gobernó Michoacán de 1996 a 2002. Entregó la estafeta al perredista Lázaro Cárdenas Batel, lo que le generó enemistades en su propio partido y el congelamiento político por más de una década. En esa época compitió con el perredista Cristóbal Arias Solís y el panista Felipe Calderón Hinojosa. 

Tinoco Rubí fue "generoso" con la prensa local, a cuyos miembros benefició con dádivas que iban desde terrenos y casas, hasta concesiones de transporte público y pagos nominales. 

Genovevo Figueroa Zamudio (Del PRI)

Gobernó el estado de diciembre de 1988 al 14 de septiembre de 1992. Sus detractores lo acusan de haber reprimido violentamente las primeras manifestaciones del entonces primer partido de izquierda, PRD.

También lo vinculan con grupos estudiantiles de choque para romper manifestaciones sociales.

Fue amigo personal de Rosa Verduzco Verduzco, “Mamá Rosa”, y mandó desalojar a los primeros padres de familia que denunciaron frente a Palacio de gobierno, en Morelia, las irregularidades del albergue "La Gran Familia" de Zamora, en 1991. 

Lázaro Cárdenas Batel (Del PRD)

Fue el primer gobernador de oposición en el estado. Su mandato transcurrió del 15 de febrero de 2002 al 14 de febrero de 2012.

Durante su mandato creció la deuda pública en un 200% y muchos de sus excolaboradores, como el exsecretario de Finanzas, Humberto Suárez López, fueron acusados de enriquecimiento ilícito.

Promovió e implementó diversos programas de corte social como el de útiles y uniformes escolares gratuitos.

Sin embargo proveedores del ramo acusan a este tipo de políticas públicas de haber generado un caos en la industria y haber provocado el cierre de varios comercios de este giro.

Leonel Godoy Rangel (Del PRD)

Gobernó Michoacán por un periodo extraordinario, del 14 de febrero de 2008 a febrero del 2012.

Durante su gestión estalló la violencia provocada por el crimen organizado, que hizo su máxima exhibición en un atentado público perpetrado en la plaza Melchor Ocampo, el 15 de septiembre del 2008.

Tuvo enemistad política y personal con el expresidente de la República de origen michoacano, Felipe Calderón Hinojosa.

Durante su periodo la deuda pública se incrementó en un 100% por los pasivos acumulados de los adeudos dejados por su antecesor. Además se presentaron escándalos públicos de corrupción de varios integrantes de su gabinete, y de un medio hermano suyo.