Líderes que dejan al PRD 'se debilitan'... y el partido crece: Navarrete
Las renuncias de líderes como Cuauhtémoc Cárdenas, Marcelo Ebrard o Alejandro Encinas hasta ahora no han afectado al Partido de la Revolución Democrática (PRD), que en las elecciones del próximo domingo 7 de junio aspira a "consolidarse" como la principal fuerza de izquierda en México, dice su dirigente nacional, Carlos Navarrete.
En entrevista con CNNMéxico, Navarrete incluso sostiene que quienes han dejado al PRD —argumentando desacuerdos con la dirección encabezada por la corriente Nueva Izquierda o Los Chuchos— pierden presencia en el país, mientras que el perredismo crece entre las preferencias de la ciudadanía.
"Observo que el PRD es una institución construida por millones de mexicanos, que tiene muchas más fortalezas que algún líder en lo particular", dice Navarrete.
"Es más, podría decir que hoy se está demostrando, y espero que se confirme el 7 de junio, que los liderazgos del PRD son producto del esfuerzo de muchos miles de perredistas, y que cuando esos liderazgos abandonan al PRD o se van a otras aventuras, quedan reducidos a su mínima expresión y el colectivo perredista sigue saliendo adelante", subraya.
Las renuncias al PRD comenzaron luego de las elecciones de 2012. En septiembre de ese año, el excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador anunció su salida del perredismo para tratar de formar un nuevo partido, Morena, el cual competirá por primera vez en los próximos comicios.
Durante 2014 y lo que va de 2015, otros políticos se han sumado a las filas de experredistas por sus diferencias con Nueva Izquierda. Entre ellos están Cuauhtémoc Cárdenas , fundador del PRD y tres veces candidato a la presidencia por sus siglas; Marcelo Ebrard , exjefe de gobierno del Distrito Federal; Alejandro Encinas , senador en esta Legislatura, y otros legisladores federales y locales.
Para Navarrete, sin embargo, a pesar de estos hechos o de escándalos como la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa —presuntamente ordenada por José Luis Abarca, quien ganó la alcaldía de Iguala postulado por el PRD—, el perredismo no enfrenta su peor panorama previo a una elección y aspira a ser una fuerza competitiva.
"Hemos tenido momentos más difíciles en otros momentos de la vida del país y del partido. Creo que este proceso electoral va a consolidar un sistema en el que el PRD es, y espero que lo demuestre, la primera fuerza de la izquierda mexicana. Es un partido con activos en el territorio, con funcionarios, con gobernadores, con legisladores pero, sobre todo, con más de 2 millones de afiliados entre la población mexicana", dice.
Expectativas electorales
En las elecciones del 7 de junio se renovará la Cámara de Diputados a nivel federal y, en el ámbito local, se elegirán cientos de cargos en 16 entidades, nueve de las cuales tendrán un nuevo gobernador.
Cuestionado sobre el asunto, Navarrete se declara confiado en que el PRD pueda obtener alrededor de 4.5 millones de votos en los comicios legislativos —300,000 más respecto a los 4.2 millones que consiguió en las intermedias de 2009—, atrayendo a los ciudadanos con propuestas como elevar el salario mínimo y fomentar la generación de empleos.
Además, y aunque rechaza adelantar una cifra de cuántos de los 500 asientos de San Lázaro esperan ganar, asegura que el PRD se mantendrá como tercera fuerza política del país, arriba de Morena y solo debajo del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido Acción Nacional (PAN).
"No veo ninguna posibilidad de que un partido nuevo, que tiene muy débil estructura partidaria, que no tiene liderazgos, que es dirigido por una sola persona, un solo líder que habla, designa candidatos, hace campaña, pronuncia discursos, sale en sus promocionales de radio y televisión, sin que ninguna otra figura aparezca, sea capaz de desplazar al PRD como la principal fuerza de izquierda", dice Navarrete.
Con relación a los nueve gobiernos estatales en disputa este año, el dirigente perredista señala que el PRD aspira a conquistar cuatro: Guerrero, donde el partido gobierna actualmente; Michoacán, donde gobernaron de 2002 a 2012; Baja California Sur, donde ocuparon el poder de 1999 a 2011, y San Luis Potosí, donde quieren competir con los candidatos del PRI y del PAN.